Showroom de Porcelanosa
Porcelanosa, fundada en 1973 en Vila-real (Castellón), es uno de los grupos cerámicos y de soluciones para arquitectura y diseño más importantes del mundo. Con presencia en decenas de países, se ha consolidado como un referente en innovación, calidad y diseño premium, abarcando desde pavimentos y revestimientos hasta baños y cocinas. En su showroom, Loxone se ha convertido en un aliado esencial para exponer el producto, realzarlo y convertir las salas de muestra en una experiencia dinámica e inmersiva.
Objetivos del proyecto
Mejorar la experiencia de visita sin restar protagonismo a los productos. Ésta fue una de las premisas principales que adoptó la multinacional en el momento de instalar Loxone como sistema de control y presentación de su showroom. En este sentido, los objetivos principales de la automatización de las salas de exposición son:
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Crear una experiencia inmersiva que realce la calidad y los acabados de las piezas expuestas, desde las baldosas hasta los ambientes de baño y cocina.
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Controlar accesos y zonas de forma ágil y profesional mediante tecnologías discretas (NFC para accesos).
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Gestionar la iluminación y el audio de forma coordinada para guiar la atención del visitante hacia el producto.
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Garantizar que el equipo del showroom pueda manejar todo con facilidad, sin necesidad de conocimientos técnicos avanzados (App).
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Mantener una filosofía de diseño donde la tecnología complementa y enmarca el producto —no compite con él—.
Datos de interés
Ubicación:
Villareal (Castellón)
Tipo de proyecto:
Showroom
Superfície del Showroom:
900 m²
Año de construcción:
2024
Beneficiario:
Porcelanosa – XLIGHT
La solución con Loxone
Un showroom como el de Porcelanosa, donde el producto debe mantenerse como centro de atención, requiere una solución que sea potente por detrás y discreta por delante. La implementación mediante Loxone se apoyó en tres pilares fundamentales:
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NFC para accesos: control de zonas y demos mediante tarjetas, que permite activar rutas de visita o demos concretas al entrar sin complicaciones.
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Iluminación DALI: gestión precisa de escenas por zonas para resaltar la percepción del material y las distintas texturas del producto.
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Audio multiroom: utilización de ambientes sonoros adaptados a cada sección para reforzar la narrativa del producto sin saturar y explicación de cada gama.
Con esta base, Loxone actúa como cerebro central: coordina accesos, luces y audio para ofrecer una experiencia coherente, fácilmente reproducible y controlable desde pulsadores físicos o desde la app, dejando al producto el papel protagonista.
Iluminación versátil
En un espacio de producto, la iluminación lo es todo: transforma superficies, realza texturas y define el valor percibido. En el proyecto con Porcelanosa se diseñaron escenas de iluminación específicas para cada exposición que ofrecen una amplia gama de posibilidades para personalizar la experiencia. Desde escenas de bienvenida dónde se juega con luz cálida, pasando por el «focus de producto» con haces de luz dirigidos para resaltar texturas y colores, hasta escenas de combinación de audio e iluminación para presentaciones guiadas activadas por NFC.
Mediante la comunicación con DALI, Loxone realiza la gestión y permite un control fino de intensidad y temperatura de color cuando procede, y todo está centralizado: los pulsadores distribuidos por el showroom (tipo Touch o similares), la app Loxone y la activación por NFC permiten al equipo elegir la forma de control que mejor encaja en cada momento. Así, la luz deja de ser un ajuste técnico y se convierte en una herramienta narrativa al servicio del producto.
Control de accesos y experiencia guiada
El uso de NFC para accesos aporta dos ventajas clave: seguridad operativa y activación contextual de experiencias. Al aproximar una tarjeta:
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Se abre la puerta a una demo privada o a una ruta preconfigurada.
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Se activan escenas concretas (iluminación, audio y voz) asociadas a la zona o al cliente.
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El personal puede personalizar la experiencia según el tipo de visitante.
Esto permite automatizar el flujo de visitas: desde la recepción hasta la zona de cierre, Loxone se encarga de orquestar la atmósfera y los elementos necesarios para que el visitante se concentre en el producto.
Tecnología que aporta valor a la marca
El proyecto con Porcelanosa demuestra que la tecnología es valiosa cuando potencia la narrativa del producto sin robarle protagonismo. Un showroom conectado con Loxone no es un catálogo tecnológico: es un espacio que cuenta una historia, que guía la mirada y que facilita la decisión de compra.
Asimismo, el control se diseñó para que cualquier miembro del equipo pueda manejarlo: pulsadores intuitivos, escenas predefinidas y acceso rápido desde la App. La curva de aprendizaje es mínima, lo que permite que el personal dedique su tiempo a lo que realmente importa: vender y atender al cliente.
En conclusión, cuando hablamos de entornos donde el detalle lo es todo, la automatización inteligente actúa como amplificador del valor del producto. Loxone permite a marcas como Porcelanosa ofrecer experiencias inmersivas que mejoran la percepción del cliente, optimizan la operativa y preparan el espacio para futuras ampliaciones.
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